Cuando las escuelas cierran en verano, muchos niños pierden las comidas gratuitas que reciben en los comedores. Un programa intenta llenar ese vacío.
Unas dos docenas de niños estaban sentados en mesas de picnic y en el césped, disfrutando de sus almuerzos en el parque Ardmore de Sparks. Era el primer día del programa de almuerzos de verano gratuitos del Banco de Alimentos del Norte de Nevada para los niños de la zona a mediados de junio.
El banco de alimentos reparte almuerzos de cinco a siete veces por semana en 41 lugares de los barrios de Truckee Meadows. Las comidas cambian cada día, pero suelen incluir una proteína, fruta, verdura, un aperitivo, como galletas, y leche.
En el parque comunitario de Sun Valley a mediados de julio, Aaron Ramirez hizo una pausa en la piscina para recibir almuerzo del camión del banco de alimentos estacionado afuera. Estaba satisfecho con su almuerzo, especialmente con las galletas saladas.
Él dijo que el almuerzo del banco de alimentos es más bueno que los almuerzos de su escuela.
Ramírez está a punto de entrar en quinto curso en la escuela primaria Bohach, al otro lado de la colina, en Sparks. Allí recibe almuerzo gratis durante el año escolar. Come los almuerzos del banco de alimentos cuando está nadando en la piscina.
Su madre, Verónica Cervantes, tuvo claros los beneficios del programa para los padres.
"Es importante porque algunas veces, no tienes el tiempo o si estás trabajando, no tienes la manera de proveer el lunch que les gusta a ellos”, dijo ella. “Entonces, pues es muy cómodo solo venir y pueden agarrar algo gratis”.
El banco de alimentos intenta que el acceso a la comida sea sencillo. Aunque Ramírez y Cervantes no viven en Sun Valley, ellos pueden ir fácil allí. El banco de alimentos instala puntos de distribución en parques, escuelas y complejos de apartamentos en todo el condado. Se dirige a lugares donde se reúnen niños y familias.
Jeanine Oppmann recorre la ruta de Sun Valley en verano, haciendo varias paradas en la zona. Dijo que a veces ve niños sin sus padres en los complejos de apartamentos en los que se para. El hecho de que el banco de alimentos va a las familias y no al revés refuerza el modelo, afirmó. Dijo que muchos padres no pueden llevar a sus niños fuera de su barrio.
El banco de alimentos pretende aumentar el acceso al no requerir a las familias rellenar ningún formulario para obtener los almuerzos. Lo único que tienen que hacer los niños es presentarse y tener entre dos y 18 años. Pero tienen que comer el almuerzo en el sitio.
En el distrito escolar del condado de Washoe, el 55 por ciento de los estudiantes son elegibles para recibir almuerzos gratuitos o reducidos, como Ramírez, en función de los ingresos de su familia. En todo el país, alrededor de 30 millones de niños reciben almuerzos gratuitos o reducidos en la escuela, pero durante el verano ese número se reduce a sólo unos 5 millones dejando un gran vacío.
Según Jocelyn Lantrip, directora de comunicaciones del banco de alimentos, esto supone un grave problema para los niños. Por ejemplo, los niños que no reciben una nutrición adecuada a menudo tienen dificultades en la escuela. También, enferman más que los niños que reciben nutrición adecuada. Lantrip quiere que todos los estudiantes estén listos para la escuela en otoño.
La red nacional de lucha contra el hambre Feeding America afirma que quienes corren el riesgo de pasar hambre suelen comer alimentos más baratos y poco saludables, lo que aumenta su riesgo de obesidad infantil.
Por eso, los almuerzos saludables gratuitos del banco de alimentos, disponibles en barrios de todo el condado con horario ampliado este verano, ayudan a reducir ese riesgo.
Jose Davila IV es miembro del cuerpo de Report for America, una iniciativa del Proyecto GroundTruth.
Si desea más información sobre el programa de almuerzos de verano, ayuda para acceder a recursos alimentarios o asistencia para solicitar ayuda alimentaria, visite el sitio web del Banco de Alimentos del Norte de Nevada.
